El versátil sensor de punto de fuga inalámbrico StreamLabs tiene una sonda en el extremo de un cable de tres pies que detecta la presencia de agua y se puede ocultar discretamente fuera de la vista.
Coloque la sonda del sensor cerca de equipos críticos o de alto valor susceptibles de sufrir daños por agua. Entre las fuentes conocidas de posibles fugas de agua se incluyen bombas de agua refrigerada, calderas de agua caliente o zonas con alto riesgo de fugas de agua (p. ej., lavabos e inodoros).
Los sensores utilizan tecnología LoRaWAN® para enviar alertas en tiempo real vía mensaje de texto o correo electrónico para prevenir un evento potencialmente catastrófico.